Amigos de lo ajeno


Imponer el relato de un espacio político debería ser, en la era de la información, la premisa de cualquier campaña proselitista. 

Teniendo en cuenta la multiplicidad de medios con los que se cuenta, uno creería, que llegar a todas las personas de un lugar determinado, debería ser bastante fácil. 

Pero ¿qué pasa, cuando ese relato no es verídico o directamente atenta con otros relatos que trabajan en paralelo o por el mismo fin? En la era de la posverdad, hemos logrado que el contenido no sea tenido en cuenta y se genere mayor atracción por lo visual, lo instantáneo y efímero. En la política ya no importan las ideas o el debate de contenidos, es más bien una carrera (de la rata diría Kiyosaki) por quien impacta más por su relato. 

Este flagelo, lo vivimos incluso en nuestras pequeñas  localidades, que en la vorágine que se plantea por pertenecer, se asimilan estas prácticas sin haber analizado el daño que ya vienen ocasionando en los lugares de origen. 

La muestra clara de este ejemplo, es el oficialismo en Villa Río Ycho Cruz, donde se puede apreciar cómo se instrumentan todas las medidas por el aparato oficial de propaganda, el proselitismo del actual intendente. Toda su campaña pasa por las redes sociales oficiales del estado municipal, violando llanamente el contrato social de un gobierno que debería pertenecer al total de la ciudadanía y no a un mero acto de "cuidar lo logrado", como si ese relato de lo logrado, fue un milagro de un mundo pos apocalíptico de la pandemia (caballito de batalla para justificar la inacción).

Una gobierno que en una gacetilla de prensa extensa hace repaso de las obras y programas aplicados en esta primera gestión, nombrando acciones que están muy lejos de su capacidad de acción, como la obra de cloacas (de implementación provincial), la ampliación de la red de gas natural que no efectuaron en estos años ni 1 metro. Paseo de Artesanos, con una historia de más de 20 años, Consultorio en la base de la ambulancia, que el mismo director del servicio, en un forzado video, aclara que fue creado por la gestión anterior, eventos del verano, cuando el barrio más poblado no puede acceder de manera digna a una red de agua potable, y un largo etc. de una imposición del relato peligroso, con animosidad de imponer una tras otra las mentiras de una gestión que pudo sobrevivir a la pandemia porque recibió un municipio en condiciones óptimas y auditadas e incluso con fondos suficientes en las arcas públicas y que gracias a las relaciones (carnales?) con el avilesismo se pudieron dar el lujo de no hacer nada por dos años con la excusa de una pandemia que afecto al mundo entero, pero que sirvió de excusa y fundamento a varios vivos que hicieron la plancha mientras la gente la pasaba mal.

Por esto, es imperioso apelar al sentido de memoria primero y al de análisis de las propuestas concretas de los distintos espacios en pugna, ya no del relato vacío y capcioso, sino al de la real implementación y el sentido de responsabilidad que debe tener un grupo político que detente dirigir los destinos de una localidad, con todo lo que eso significa, con sus reales aplicaciones y no pensadas desde la lejanía de las utopías de libros de principios de los años 20. 

La coyuntura merita sentido de pertenencia, responsabilidad y capacidad de gestión. 

A los amigos de los ajeno les espera la condena social y la imposibilidad de caminar un pueblo y mirar a la cara a sus vecinos. 

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